Sobre la eyaculación precoz
El tiempo de eyaculación es algo que preocupa mucho al género masculino. A menudo recibo varias dudas sobre si el tiempo de eyaculación es el apropiado o qué se considera demasiado corto o largo. No existen unos parámetros específicos con los que poder medir si ese tiempo es o no el correcto. La cuestión no sería si nos encontramos dentro de lo adecuado, más bien, la percepción que tenemos nosotros mismos de éste. Es cuando se eyacula de forma incontrolada y sin desearlo.
Si la persona considera que eyacula en un corto período de tiempo y esto es algo que le produce malestar no tienes más que, ponerte en contacto con un especialista quien, a través de técnicas y tratamiento le ayudará a prolongar ese tiempo de eyaculación.
Puede que este tiempo haya cambiado de repente, probablemente por alguna situación estresante que se esté viviendo en el momento, algún cambio importante o un acontecimiento angustioso. En la sexualidad se reflejan problemas y preocupaciones, al igual que nuestra sexualidad repercute en nuestra salud general. Es importante no alarmarse en esta situación para no cronificar el problema.
Aquí tenéis algunos trucos para prolongar la relación, si persiste lo mejor es acudir a un especialista;
- Tener claro que el disfrute de la pareja no depende del tiempo de eyaculación. De hecho, la mayoría de las mujeres no alcanzan el orgasmo simplemente con la penetración, normalmente prefieren la estimulación clitoridiana.
- Elegir un momento en el que no haya prisas. Las prisas nunca fueron buenas y menos en la relación sexual. Un aquí te pillo aquí te mato no está mal, pero eliminar esa presión ayudará a sentirse más tranquilo y poder centrarnos en el momento sexual que se está viviendo.
- Adquirir confianza con la persona con quien se está manteniendo la relación sexual. Es importante encontrarse en un ambiente íntimo y cercano. La comodidad es esencial para permitir que la relación fluya.
- Una relación sexual no es sólo una penetración, existen cantidad de prácticas que pueden realizarse que nos harán sentirnos satisfechos y evitar el coitocentrismo.
- Dominar la respiración es una herramienta muy potente para mejorar las relaciones sexuales (véase post “el poder de la respiración”)
- Ejercitar nuestro cuerpo nos proporciona una mayor motilidad y agilidad a la hora de mantener una relación sexual. En especial, los músculos pubocoxigeos.
Buena práctica!